Debemos tener en cuenta que la férula de descarga es un tratamiento que debe ser prescrito por un odontólogo y debe ajustarse por el mismo, pero hoy en día nos encontramos con el problema de que muchos pacientes compran supuestas férulas de descarga a bajos precios por internet, autodiagnosticándose ellos mismos el trastorno sin haber acudido antes a su dentista. El inconveniente es que muchas de las férulas realizadas a tan bajo precio no son férulas de descarga reales, sino unos dispositivos de resina blanda que no son eficaces contra el bruxismo e incluso pueden ayudar a empeorar el cuadro.